jueves, 31 de mayo de 2012

Back in time.

Y yo, aqui, la niña pequeña que solía ser muy feliz, que siempre le sacaba el lado bueno a todo. Que nunca entendía porque la gente se enfadaba con ella, y no rebuscaba en su mente lo que había hecho mal para rectificarlo. Esa niña tonta ya ha pasado. Cumplir años no es madurar, ni nada por el estilo. Cumplir años es asumir una nueva responsabilidad. Crecer. Y ahora, esa niña pequeña, que ahora tiene miedo a crecer. A dar un paso adelante. A madurar. Que desea seguir jugando en el patio de arena a piratas o a mamas y papás. Que desea seguir siendo aquella niña tan feliz que era. Y ahora, esa chica, miedosa del mundo, loca por otra parte, esa niña que se puede pasar el día hablando sola, que se ríe sin sentido, que ama a sus amigas y a las que hacen felices a sus amigas, que ama locamente a One Direction, que siempre intenta ser feliz sea como sea y siempre pone una sonrisa en su cara para que nadie sepa que esta sufriendo, porque sabe que lo superará. Esa chica, tiene miedo. Tiene miedo a todo, absolutamente a todo. A crecer, madurar; responsabilizarse por encontrar un trabajo, una casa, dinero; a el fin del mundo. A no poder volver a ver a sus amigas. Una chica que su frase sería "Que se pare el mundo que yo me bajo" Porque quiere dejar de crecer. Esa niña, que siempre le saca el lado bueno a todo, que reflexiona a mas no poder, que siempre da consejos como puede, que se preocupa por los demás, que intenta siempre hacer feliz a la gente. Esa niña, no aguanta todo el peso del mundo. Y por eso y por más cosas, esa niña quiere volver a ser la capitana de los piratas y que su mejor amiga sea un bebe. Quiere volverse a sentir una "malota" por subir hasta la barra blanca de las barras prohibidas, por subir juguetes a la casa de techo de paja cuando estaba prohibido, de ir por sitios prohibidos del patio, de quitarle las piedras a la arena, de jugar a las supernenas.

Esta chica quiere volver a ser tan feliz como era antes.